Asciende. Rueda. Vuela...

No sé cómo se titula, solo sé que es tan bonita... Miguel Hernández la escribió en la cárcel, igual que el librito de cuentos que estaba preparando para su pequeño Manolillo, para cuando fuese grande y conociera las letras, que también lo escribió allí.

Forma parte del Cancionero y romancero de ausencias que no fue capaz de terminar, porque le llegó la muerte.

Léela tú, ya verás: que es muy chica y todo eso —al menos, yo solo encontré este fragmento—,😔 pero es  maravillosa 🥰.

(…)

Pasión del movimiento,

la tierra es tu caballo.

Cabálgala. Domínala.

Y brotará en su casco

su piel de vida y muerte,

de sombra y luz, piafando.

Asciende. Rueda. Vuela,

creador de alba y mayo.

Galopa. Ven. Y colma

el fondo de mis brazos.

Miguel Hernández

✏️ Imagen de cabecera: Wassily Kandinsky, Caballo abstracto (1911) ✨️✨️

✨️✨️ No te vayas, peregrino, sin dejar un comentario 🙏🏻. Que, mientras esté formulado desde el respeto, será muy bien recibido 🙃✨️✨️

✨️🐌 Lola 🧚‍♀️✨️