De vuelta al librito sin título

Todo eso decían las palabras escritas en el Libro pero, aún así, a mí me parecieron poquísimas 🤦🏻‍♀️. Quise saber más sobre cada uno de los protagonistas de aquella historia que, al fin y al cabo, era la de Brocelianda. Pero tuve miedo de que el duende despertase y me viera pasando y pasando esas páginas que nunca debí haber hojeado siquiera. ¿Habría en el librito sin título de las tapas verde botella también cosas mecanografiadas sobre los reyes de los bosques?

Seguro que sí. Seguro que lo había. Me acordé de Simón, el Mago, y pensé que, a lo mejor, era mucha más la información referente a las maravillosas vidrieras góticas la que había dejado atrás.

Miré a mi alrededor. Un poco de sombra se dejaba caer desde un almendro demasiado viejito. Fui hasta sus pies, dejando el Libro grande en el lugar en el que siempre debió estar sin moverse ni un ápice, y me senté al fin.

El mundo se había perfumado de mil aromas. Aspiré el aire y cerré los ojos. Al abrirlos de nuevo, el universo coloreado de las catedrales se mostraba otra vez ante mí... ¿seguimos buscando en sus misterios, viajer@? 

✏️ Imagen de cabecera: Autor ¿desconocido? 🤔

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✨️🌸 Lola 🐦✨️